18 de Junio de 1815, Napoleón Bonaparte está decidido a alzarse de nuevo con el poder y reclamar toda Europa como premio. Las fuerzas lideradas por un modesto pero invicto Arthur Wellesley y su carismático aliado prusiano Blücher se acumulan para detener a Napoleón en su camino.

1815: La batalla de Waterloo es un juego de cartas asimétrico, competitivo y táctico. Es el tercer juego del aclamado  Sistema de Batalla Histórica, y sucesor de los galardonados juegos 1066: La batalla de Hastings y 1565: El asedio de Malta. Profundamente temático, pero cuidadosamente investigado, 1815: La batalla de Waterloo presenta el enfrentamiento como nunca antes lo habías visto.

El primer juego de la serie, 1066: La batalla de Hastings ganó los premios al Juego del Año y al Mejor Arte, y fue finalista en los premios Golden Geek y Origins al «Mejor Juego de Mesa Histórico». 1565: El asedio de Malta ganó el “Sello de Aprobación” del canal Dice Tower, así como el premio “Must Play” de la revista Tabletop Gaming.

1815: La batalla de Waterloo rinde homenaje a este embriagador legado a la vez que insufla nueva vida al sistema con un arte totalmente nuevo y original, nuevos personajes, nuevas unidades, nueva narrativa histórica y con nuevas habilidades de cartas…

  • En español.
  • Juego para 2 jugadores en modo competitivo.
  • Por primera vez se pueden jugar 3-4 jugadores (con 2 juegos): despliega unidades en el campo de batalla de tu aliado
  • Modo solitario mejorado: una preparación más sencilla y la oportunidad de luchar contra múltiples enemigos.
  • Nueva baraja de Clima (disponible como expansión): afecta a ambos lados del campo de batalla.
  • Formaciones históricas para las tropas: cuadro, línea y columna.
  • La «Grande Batterie» de Napoleón: los invencibles cañones franceses.
  • Defensores de la cresta: ¡educados en las tácticas de Wellington para salvar a tus soldados!
  • General barro”: empapa a tus enemigos con barro y lluvia.
  • Duelo: apunta a unidades específicas para hacer polvo a tus enemigos.
  • Personajes predestinados: héroes poderosos cuyas muertes traen consecuencias.
  • Hermanos de armas: ¡unidades asesinas que traen a sus amigos consigo!
  • Voluntad de hierro: coloca las unidades en pilas para duplicar su eficacia.
  • Mejoras: ¡paga más recursos para potenciar las cartas a medida que las juegas!
  • Reservas: invoca unidades en tus reservas, ¡o incluso en los campos de batalla de tus aliados!

1815: La batalla de Waterloo es un juego asimétrico y táctico de cartas no coleccionables que se centra en un año crucial por la hegemonía del Mediterráneo. Cada jugador, como francés, inglés o prusiano (con la expansión), debe reunir tropas y recursos para superar los diferentes obstáculos en su camino hacia el frente, y una vez llegados allí, enfrentarse al enemigo.

Basado en un concepto de juego táctico y rápido, no es necesario que los jugadores construyan su mazo de cartas, cada jugador comienza con el mazo de cartas de su facción, lo baraja y comienza a jugar.

mock up juego 1815

El juego se desarrolla mediante rondas de 4 fases cada una en las que los jugadores juegan sus cartas y construyen sus ejércitos desplegando cartas de unidades, personajes, tácticas o accesorios y jugando cartas de eventos.

Las fases de juego son:

  • Fase de Preparación: en esta fase se comprueba si se han cumplido las condiciones de victoria, y roban nuevas cartas de su mazo o descartan el exceso de cartas en su mano.
  • Fase de Despliegue: en esta fase, los jugadores se alternan en realizar una de las siguientes acciones: jugar una carta, ejecutar una acción, sacrificar una carta o pasar. Esta fase concluye cuando ambos jugadores pasan.
  • Fase de Frente: en esta fase es donde se desarrolla el combate si la batalla ha empezado. Los jugadores comparan los valores de las cartas que han asignado para cada frente y en función al resultado se asignan daños a cada frente.
  • Fase de Objetivo: esta fase sólo tiene lugar antes de la batalla. Durante esta fase cada jugador intenta cumplir con el objetivo que tiene activo en ese momento.

Cada jugador dispone de una serie de cartas de objetivo que su líder debe cumplir para alcanzar su meta final que no es otra que ganar la batalla de Waterloo. De este modo, los jugadores primero deberán prepararse para la batalla mediante cartas de personaje y unidades que se van desplegando en el campo de batalla.

Una vez que el último objetivo es revelado, comienza la batalla y los objetivos principales del jugador serán destruir a las unidades enemigas o al líder de su oponente. Para ello el combate se desarrolla en un campo de batalla dividido en 3 frentes: El Castillo d´Hougoumont, La granja de la Haye Sainte  y la Granja Papelotte.

Cada frente representa el enfrentamiento de unos 2000 hombres de cada bando aproximadamente. Los jugadores deberán infligir 10 puntos de daño al enemigo en un frente para derrotarlo, lo que equivaldría a causar unas 1000-1500 bajas a tu enemigo. El primer jugador que consiga derrotar a su adversario en 2 frentes, o que consiga matar al líder enemigo se convierte en el ganador del juego.

Es posible jugar en solitario ya que se incluye un reglamento con una IA que dispone de varios niveles de dificultad para el jugador enemigo. Todas las cartas pueden usarse en el modo de juego en solitario, incluso algunas de ellas tienen efectos específicos para este modo.

Con dos copias del juego, 1815, La batalla de Waterloo se puede jugar a 3 ó 4 jugadores, donde un equipo aliado lucha contra un equipo francés.

Preparación:

  • Un jugador francés juega como Napoleón Bonaparte y toma la primera ficha de jugador.
  • Un jugador aliado juega como Sir Arthur Wellesley y se sienta frente al jugador de Napoleón Bonaparte.
  • Un jugador francés juega como Michel Ney y se sienta junto al jugador de Napoleón Bonaparte.
  • Un jugador aliado juega como Gebhard von Blücher y se sienta junto al jugador de Sir Arthur Wellesley, y frente al jugador de Michel Ney.

Cada jugador construye su mazo siguiendo las reglas de construcción de mazos, teniendo en cuenta la regla sobre los personajes únicos. Se organizan dos partidas normales simultáneamente: Napoleón contra Sir Arthur Wellesley, y Michel Ney contra Gebhard von Blücher (los jugadores experimentados pueden mezclar los equipos, incluso incluyendo ejércitos de otras partidas).

Orden de los turnos:

Las dos partidas se juegan a la vez y por orden de turno:

  • El primer jugador toma su turno, luego
  • El oponente del primer jugador toma su turno, luego
  • El compañero de equipo del primer jugador toma su turno, luego
  • El oponente del compañero de equipo del primer jugador toma su turno.

Juego:

Cada partida se juega de forma casi independiente y normal, ya que cada jugador intenta derrotar a su oponente, con las siguientes excepciones:

  • Los eventos, los accesorios y las habilidades dirigidas a los enemigos (por ejemplo, el tirador) pueden jugarse en el campo de batalla de un compañero de equipo o afectarlo.
  • Como Acción, un Líder puede usar su habilidad de Comandante para mover uno de sus propios Personajes o Unidades a sus Reservas.
    Como una Acción, un Personaje o Unidad en las Reservas puede ser movido a cualquier Frontera, incluyendo el campo de batalla de un Compañero de Equipo.
  • Un Personaje o Unidad movido al campo de batalla de un Compañero de Equipo es ahora controlado por ese Compañero de Equipo.
    Ten en cuenta que las habilidades de Comandante no pueden usarse para mover las cartas de un Compañero de Equipo.

Jugador derrotado:

Un jugador derrotado ya no puede contribuir al juego y queda relegado a ser animador. Sin embargo, su oponente victorioso continúa tomando sus turnos en orden de turno y todavía puede enviar Unidades y Personajes a su Compañero de Equipo a través de las Reservas y jugar Eventos, Adjuntos y otras habilidades para ayudar a su Compañero de Equipo a intentar ganar.

Victoria y desempate:
Si un Equipo gana ambas partidas, el ganador está claro, pero si el Equipo Aliado gana una partida y el Equipo Francés gana la otra, la victoria es para el Equipo con el mayor daño total en Fronteras en ambas partidas. Si todavía persiste el empate empate entonces la victoria es para el Equipo que posea la primera ficha de jugador.

(textos extraidos de Wikipedia)

La batalla de Waterloo fue un combate que tuvo lugar el 18 de junio de 1815 en las proximidades de Waterloo, una población de la actual Bélgica situada a unos veinte kilómetros al sur de Bruselas. En ella se enfrentó el ejército francés, comandado por el emperador Napoleón Bonaparte contra las tropas británicas, neerlandesas y alemanas, dirigidas por el duque de Wellington, y el ejército prusiano del mariscal de campo Gebhard von Blücher.

Tras la vuelta del emperador de su exilio en la isla de Elba, dando inicio al periodo conocido como los «Cien Días», al reunirse la Séptima Coalición contra él, Napoleón decidió invadir los Países Bajos, lugar de reunión de las tropas de la nueva alianza. La batalla significó el final definitivo de las guerras napoleónicas.

La batalla se inicia a las 11:30 del día 18, cerca de Waterloo, donde Wellington responde al ataque frontal de Napoleón, mientras espera a los prusianos, que avanzan lentos a causa de la lluvia. Durante esa decisiva mañana los dos comandantes principales dieron arengas a los suyos y repartieron ginebra, galletas y carne, caso de Wellington, y coñac, caso de Napoleón, el cual estaba en mal estado por una cistitis. Por otra parte, a las 16:00, en Wavre, Grouchy persigue a los prusianos que habían huido y no puede socorrer a las diezmadas fuerzas de Napoleón.

En Waterloo, Wellington tenía la granja fortificada de Hougoumont anclando su flanco derecho, y varias otras granjas a su izquierda. Napoleón notó este gran problema antes incluso de que la batalla comenzase. Sin estar seguro de la situación del ejército prusiano desde la lucha en Ligny dos días antes, Napoleón estaba totalmente convencido de la necesidad de empezar el asalto a las posiciones de Wellington con el arma más temida de la época, la artillería de campo francesa. Su entrada en fuego fue retrasada por unas horas hasta que el suelo empapado por la tormenta de la noche anterior se hubiese secado lo suficiente para soportar el peso de los cañones. El barro también estorbó a la infantería y la caballería mientras se colocaban en posición. Cuando finalmente la artillería francesa abrió fuego sobre las posiciones de Wellington a las 11:35, el esperado efecto en las tropas aliadas fue minimizado por el terreno embarrado y blando que absorbía el impacto de muchas de las dañinas balas de cañón. Además, Wellington había desplegado a la mayoría del ejército aliado detrás de la cima, para proteger a sus tropas de la esperada cortina de fuego.

Un elemento crucial del plan de batalla francés era atraer a la reserva de Wellington al flanco derecho en defensa de Hougoumont, pero los ataques a la granja no tuvieron éxito, aunque en un punto rompieron la defensa exterior de ésta antes de ser rechazados. Hougoumont se convirtió en una batalla dentro de otra, y a lo largo del día su defensa continuó atrayendo miles de valiosas tropas francesas a un ataque sin frutos, mientras casi todas las reservas de Wellington continuaban en su centro.

A las 13:30, Napoleón ordenó al mariscal Ney enviar a la infantería de d’Erlon adelante contra el centro izquierda de Wellington, pasando al este de la granja de La Haye Sainte. El ataque se centró en la 1.ª brigada belga-neerlandesa, comandada por el mayor general Willem Frederik van Bylandt, que era una de las pocas unidades posicionadas en la parte delantera de las colinas. Jerome Bonaparte, hermano de Napoleón, también estuvo presente en el ataque. Después de sufrir un intenso bombardeo de artillería e intercambiar descargas con los elementos avanzados de d’Erlon durante nueve minutos, los soldados de van Bylandt -en inferioridad numérica- fueron forzados a retirarse al otro lado de la colina, entre las líneas de la división del teniente general Thomas Picton. La división de Picton incluía unidades veteranas de la campaña en la península ibérica, entre las que se encontraban los regimientos Highland, algunos de los pocos que eran curtidos en combate y que permanecían con el contingente británico de Wellington en Waterloo. La división de Picton avanzó sobre la cima de la colina para enfrentarse a d’Erlon. Los británicos fueron destrozados por descargas y contraataques, pero los soldados de Picton permanecieron firmes, deshaciendo el ataque. El asalto francés fue finalmente rechazado por la caballería pesada británica comandada por lord Uxbridge y la famosa carga de los Scots Greys. Tan espectacular evento tuvo un coste tan alto para la caballería pesada que, colectivamente y algo desperdigados, desempeñaron un pequeño papel durante el resto de la batalla. Picton no llevaba el equipaje militar puesto al haberse extraviado y luchó con ropa de civil y usó como espada un paraguas; murió en este enfrentamiento. Colin Hackett, después de recibir varios balazos, siguió agarrando la bandera de su regimiento hasta que murió.

Cuando Napoleón dejó inesperadamente el campo de batalla a las primeras horas de la tarde, Ney, el lugarteniente de los franceses, confundió una maniobra aliada para reposicionar sus tropas más atrás de las colinas con una retirada general. Sin consultar, ordenó avanzar a un regimiento, luego a otro, luego a otro, hasta que un masivo asalto de unos 5000 efectivos de caballería atronaba subiendo la pendiente. Los ataques fueron repelidos doce veces por los sólidos cuadros de infantería aliados (cuatro filas de profundidad con la bayoneta calada, vulnerables a la artillería o a la infantería, pero mortales para la caballería), el rápido fuego de la artillería británica obligó a la caballería francesa a retroceder para reagruparse y los decisivos contraataques de los regimientos de la Caballería Ligera británica y la Brigada de Caballería pesada neerlandesa acabaron por desbaratar la desordenada ofensiva imperial.

Después de numerosos ataques a la colina, la caballería francesa fue efectivamente destrozada. Los prusianos estaban enfrentándose ya al flanco derecho del Ejército Imperial cuando La Haye Sainte cayó ante los franceses al principio de la tarde. Con el centro de Wellington expuesto, Napoleón empeñó su última reserva, la invencible Guardia Imperial. Después de marchar a través de una niebla de balas y metralla, parecían confiados en machacar a Wellington. Pero sin saberlo, 1500 Guardias británicos, bajo el mando del mayor general Peregrine Maitland, estaban cuerpo a tierra para protegerse de la artillería francesa. Levantándose todos a una, devastaron a la sorprendida Guardia Imperial con descargas de fuego a quemarropa y después cargaron. La Guardia Imperial, por primera vez en su historia, retrocedió en desorden y caos. Wellington, juzgando que la retirada de la Guardia Imperial había desanimado a todos los soldados franceses que la habían visto, espoleó a su caballo Copenhagen y ondeó su sombrero al aire como señal para un avance general.

Después del fracasado ataque de la Guardia al centro británico, la Guardia Imperial francesa corrió por sus reservas de tres regimientos (algunas fuentes mencionan cuatro) al sur de La Haye Sainte para una última resistencia frente a los hanoveranos (Legión Alemana del Rey). Una carga de la brigada del mayor general Frederick Adam y una segunda división anglo-aliada, al mando del teniente general sir Henry Clinton, llevó a la confusión: aquellos que permanecían en unidades semicoherentes lucharon y se retiraron hacia La Belle Alliance. Fue en este momento cuando el coronel Hugh Halkett aceptó la rendición del general Pierre Cambronne.

Casi al mismo tiempo, los prusianos, después de una batalla que había durado una hora, finalmente arrojaron a los franceses fuera del pueblo de Plancenoit, que estaba en el extremo (británico) izquierdo del campo de batalla. La última unidad en retroceder fue la Vieja Guardia de la Guardia Imperial, estacionada en la iglesia y el cementerio de Plancenoit.

Todo el frente francés empezó entonces a desintegrarse bajo el avance general del ejército anglo-aliado y el ejército prusiano que siguió a la captura de Plancenoit. La última fuerza francesa coherente fueron regimientos de la Guardia Imperial estacionados alrededor de La Belle Alliance. Eran una reserva final y una guardia personal de Napoleón. Durante un momento Napoleón confió en que, si se mantenían firmes, el ejército francés los seguiría. Pero cuando la retirada se convirtió en una fuga, se vieron forzados a formar cuadros como protección frente a los elementos avanzados de la caballería aliada. Formaron en dos cuadros, uno a cada lado de La Belle Alliance. Hasta que fue persuadido de que la batalla se había perdido y que debería partir, Napoleón comandó el cuadro que se formó en el terreno elevado a la derecha (británica) de la La Belle Alliance. Los prusianos se enfrentaron al cuadro de la izquierda y la brigada del general Adams cargó contra el cuadro de la derecha, forzando la retirada. Según caía la oscuridad, ambos cuadros se retiraron de la batalla hacia Francia en relativo buen orden, pero la artillería francesa y todo lo demás cayeron en las manos de los británicos y los prusianos y se vieron rodeados por miles de franceses que no formaban parte de ninguna unidad coherente. La caballería británica y aliada persiguieron a los franceses hasta las 23:00, los prusianos, relativamente frescos tras una corta batalla, persiguieron a los restos del ejército francés durante toda la noche.

Aproximadamente a las 21:00, Wellington y Blücher se encontraron en el que anteriormente había sido cuartel de Napoleón La Belle Alliance, habiendo capturado al mariscal Guillermo conde de la Colonialé, significando el fin de la batalla. A las 21:30, Wellington empezó a redactar su informe sobre la batalla. Las bajas fueron graves en los dos bandos, lo que hizo pronunciar a Wellington al final de la lucha, al ver el campo de batalla plagado de cuerpos inertes: «Al margen de una batalla perdida, no hay nada más deprimente que una batalla ganada».

— Wikipedia

Edad recomendada:
a partir de 10 años

Cantidad de jugadores:
de 1 a 2

Duración estimada:
30-40 minutos

CONTENIDO:

  • Más de 170 Cartas tamaño 89×63,5 mm
  • 80 marcadores de daño de madera
  • Más de 20 marcadores de cartón
  • Dial para juego en solitario.
  • Reglamento del juego.
  • Reglas para jugar en solitario.

CRÉDITOS:

Autor: Tristan Hall
Ilustradores: The Creation Studio, Ania Kryczkowska, Arkadiusz Banas, Guillaume Menuel, Mark Bulahao
Diseño gráfico: Darren Marks, Tristan Hall
Edición de las reglas: Patrick Brennan

Traducciones y revisiones: Sergio Rodríguez Yanes, Javier Romero y Luis A. Hernández

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