Los Sagittarii era el nombre que recibían en la Antigua República de Roma los arqueros que formaban parte de las tropas auxiliares, y que apoyaban al resto del ejército de legionarios. La mayor parte de estos soldados eran de infantería, se desplazaban a pie.
Los arqueros romanos tienen arcos largos o compuestos, para disparar a grandes distancias. Apenas tienen protección para el combate cuerpo a cuerpo, pero disponen de espadas para combate cercano.
Desde la Segunda Guerra Púnica en adelante, los arqueros del ejército romano eran, en su gran mayoría, mercenarios provenientes de la isla de Creta, la cual poseía una larga y respetada tradición de arqueros.
El término sagittariorum como parte del título de una unidad de infantería o caballería indicaba que era un regimiento especializado de arqueros. El título proviene de la palabra latina sagittarii, la cual deriva de sagitta, “flecha”.
Aunque estas unidades se especializaban en el tiro con arco, es difícil saber si el título sagittariorum indicaba que todo el regimiento estaba compuesto de arqueros, o simplemente que los arqueros estaban presentes en una mayor proporción que en otros regimientos. Y es que se supone que las demás unidades tenían sus propios arqueros, ya que de otra forma sería muy difícil poder realizar operaciones independientes sin el apoyo de arqueros.
Arqueros del ejército romano
En formación es interesante tenerlos situados tras la infantería, para evitar se atacados, pero preferiblemente con espacios delante para que puedan ver fácilmente al objetivo al que van a disparar sin tener que aplicar ninguna penalización.
Comparativa de los arqueros romanos Sagittarii
Estos arqueros romanos no tienen el poder de ataque a distancia que poseen los arqueros púnicos, y también tienen una armadura ligeramente inferior, pero aún así son unidades valiosas en el combate, que si se combina con buenos eventos pueden diezmar al enemigo de forma muy eficaz.
Arqueros romanos auxiliares
